Todo tiene un sentido. Protección de la familia. Estructura en una empresa en la que trabajas donde tienes seguridad. Equilibrio.
Una de las cartas menores más simbólica y en la que se superponen más significados. Superficialmente la carta representa el hogar establecido. El mundo cotidiano que contiene una magia mayor de la que ninguno de nosotros puede ver habitualmente.
¿Cómo es tu vida familiar y tu relación con tu hogar? Muchas veces la bendición de poder tener una estructura bajo la cual vivir, nos pasa desapercibida. ¿Estás satisfecha con las estructuras actuales de tu vida? ¿Cuál es tu definición de éxito y cómo esta misma definición se relaciona con tu vida actual?
La vida es dinamismo, no somos las mismas personas en todas nuestras etapas, ni siquiera en un mismo momento. La definición de tu propio éxito personal y espiritual tal vez haya cambiado con el tiempo. Siempre hay espacio en la vida para crecer y cambiar. Es posible ser expansiva (efusiva, extrovertida) al mismo tiempo que sentirte estable. Encuentra tu centro y cuando sientas ansiedad regresa a él.
Un Arcano Mayor con un significado especial: un llamado a efectuar cambios importantes que transcienden a la comprensión. Renacimiento. Vida eterna. Un nuevo comienzo lleno de revelaciones.
Si te aparece esta carta en una lectura, te encuentras ante una oportunidad valiosa de trascender. Indica también terapia, compartir con otros.
Seguro en algún momento de tu vida te has encontrado en una encrucijada (la cruz en el estandarte, la cruz de la crucifixión) donde se te exige una decisión sobre si has de hacer o no un cambio importante. Y en ocasiones puede parecer como si algo interior ya hubiera decidido, y la única opción que te quedara fuese seguir adelante con la acción apropiada.
La carta se llama El Juicio porque, como la Justicia apunta a ponerse de acuerdo con la experiencia pasada, como un paso necesario para trascenderla. Con la Justicia, la experiencia y la respuesta eran personales y se basaban en las acciones de la persona en el pasado. Aquí, una fuerza mayor que nosotros mismos es la que nos orienta y nos llama, y el Juicio no es simplemente una evaluación del significado de la propia vida, sino de la verdadera naturaleza de la existencia y de cómo nosotros y todos los seres humanos somos parte de ella.
En la carta se observa un ave divina que invita a los murciélagos a unirse a ella en la liberación. Así como los murciélagos, ya no tienes por qué vivir en la oscuridad cuando sientes el llamado de “la luz”.
El Juicio nos recuerda que no hay liberación personal. Cada ser humano es parte de la raza humana, y, por consiguiente, es responsable de la evolución de la misma. Nadie puede ser verdaderamente libre mientras haya alguien que esté esclavizado. Al mismo tiempo, cualquier liberación individual nos libera a todos.
Independientemente de lo que esté pasando en tu vida, sientes dentro de ti un impulso o llamada interior que te mueve a hacer un cambio importante. El cambio puede referirse a algo mundano o inmediato o a una variación total de la visión de tu vida. Lo importante es la llamada. De hecho, tú ya has cambiado, las viejas situaciones, tu antiguo sí mismo, se ha extinguido ya, y ahora es cuestión simplemente de reconocerlo.